Justicia, desigualdad y migración
Por: Miguel Angel Langle Flores Alba Nidia Morin Flores La historia del pasado sábado por la noche de Franccis Ngannou, el excampeón mundial de peso pesado de las Artes Marciales Mixtas (AMM), parece una historia más de David contra Goliat en el deporte de contacto, excepto por algunas agravantes merecedoras de denotarse, en términos de justicia y desigualdad. Me gustaría comenzar en cómo el ex inmigrante camerunés llega a disputar una pelea de exhibición contra el actual campeón invicto de boxeo de peso completo, en una pelea de pago por evento, acontecida en Riad, frente a la realeza saudí. Franccis Ngannou, nacido en Batié, una localidad de 10 mil personas denotada por la pobreza y situada en la zona montañosa oeste de Camerún, no muy lejos de la frontera nigeriana, comenzó a trabajar en una mina de arena a los 10 años para ayudar a su familia. Luego de 12 años como minero, Ngannou vende sus escasas pertenencias y se muda a la cabecera regional para poder entre...