Un ojo entre lo nefando y la parresía. El registro de la violencia chilena

Por Manuel de J. Jiménez ***** ¿Por qué es importante ver El enemigo poderoso o la imagen nefanda (2025) de Eli Neira? Aunque sea duro, es un deber moral preservar la memoria colectiva. Más aún cuando esta memoria es dolorosa, porque nos recuerda y sitúa otra vez en lo que la conciencia colectiva –nacional o nuestra-latinoamericana– quiere desechar para continuar, en palabras de Guattari, con el curso de la máquina de captura capitalística. Por lo que sé, últimamente en Chile se busca atenuar y, en algunos casos, justificar la violencia inhumana y la represión de esa máquina estatal que se activó con sangre y cuerpos, no lejos de lo que sucedió en el 73. Poco ha cambiado la situación desde entonces y por eso la dictadura se niega a morir y la democracia no termina por nacer. Se trata, como sucedía en Sudamérica en la década del setenta, de un tipo de violencia que fue calificada con tino por Julio Strassera en su famoso alegato de clausura. En efecto, la respuesta del estado fue...