El certamen de belleza que sirvió para hablar de nuevo del volcán de las Américas: Nicaragua
Por: Thalía Krügger R
Los últimos eventos con miras internacionales es un puente de visibilidad y por qué no, de
inclusión a lo poco conocido.
Tal como en su momento, el sabio Aristóteles dijo:
Aquello que es común al mayor número de personas es lo que menos cuidado recibe, todo el mundo está más inclinado a descuidar el deber que espera que otro cumpla.
En otras palabras, ningún evento deportivo, cultural o de
belleza está asegurado ni por los cariocas, o teutones, así como las embajadoras de Sudamérica
o de la Unión Americana. En estas líneas, distinguido lector le comparto la noticia que ha asombrado y a la vez resaltado la
belleza de la tierra de volcanes y lagos, donde la guapa modelo, comunicadora y activista a
favor de la salud mental Sheynnis Palacios, se coronó como Miss Universo 2023. Se tarta de la primera
nicaragüense y centroamericana en conseguir dicho título de belleza.
La noticia que sorprendió a muchos y dio pie para que en Nicaragua se saliera por primera vez en
los últimos 5 años en las noticias internacionales, dando la oportunidad a que la mermada “Libertad de Expresión” fuera uno de los derechos más utilizados en la región.
Este logro brindó a
todos los “nicas” una alegría que trasciendió e inspiró, a pesar de las ideológicas barreras, hecho que por sus méritos, y nadando contra marea; en una nación que sufre crisis migratoria, económica y
de Derechos Humanos logró hacer soñar a muchos.
Entonces se habló, se compartieron noticias sobre esta bella nación lo cual dio pie a que la redes extendendieran sus observaciones por días enteros, y por un momento las apalabras del filósofo neerlandés Baruch Spinoza tuvieron más sentido:
Que el papel del Estado no sea restringir la libertad… sino garantizarla.
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