No leas el caso Tzompaxtle Tecpile y otros vs México, mejor lee El Fistol del diablo de Manuel Payno

                                                                                                                 



                                                                                                                          Por Valeria Hernández Reyes


Pensamos que la discusión sobre la presunción de inocencia y la prisión preventiva son temas actuales en México, no obstante, en el folletín El Fistol del Diablo (1845-1848) de Manuel Payno encontramos evidencia que demuestra que es un asunto de interés para la sociedad mexicana desde el siglo decimonónico.

En el capítulo XIX del citado libro, Manuel Payno nos adentra en el drama vivido por muchos connacionales al ser detenidos ilegalmente para después ser enviados a La Acordada, la peor cárcel de México en el siglo XVIII. Por medio del personaje ficticio de Celeste, una mujer menor de edad arrestada por presuntos delitos de robo, infanticidio y parricidio, entendemos que, en México se tenía ya conciencia de las atrocidades que causa la violación al principio de presunción de inocencia.

A lo largo del capítulo XIX, Manuel Payno diserta maravillosamente sobre la falta de un debido proceso; la desigualdad ante la ley entre hombres y mujeres; y la ausencia de medidas de reinserción social en la sociedad mexicana. En específico, Celeste fue víctima del abuso de poder de un alcalde que levantó falsos contra ella; víctima de la sociedad que prefirió juzgarla sin pruebas; víctima de la cultura del punitivismo y de un sistema penal fallido.

Por medio de la ficción Manuel Payno señala distintos abusos ejercidos en la vida real por parte de la autoridad durante todas las etapas del proceso penal, desde la aprehensión hasta la sentencia, dejando en claro que el castigo y la tortura acompañan al sistema penal mexicano desde hace siglos. Por ejemplo, si una persona cuestionaba su detención ilegal, eso era motivo suficiente para propinarle una golpiza La mala suerte no terminaba ahí, después de las lesiones físicas continuaban las lesiones psicológicas causadas por los maltratos practicados en la que fuese la peor cárcel pública del país; y finalmente seguía la agonía de un proceso judicial largo que muchas veces solo ocasionaba que los reos se suicidaran por la desesperación de vivir en condiciones inhumanas. 

La Acordada era un antiguo edificio construido por el gobierno español, estuvo en funcionamiento hasta el año 1774. Era un recinto sin luz, sin ventilación, húmedo lleno de polvo, basura, insectos y un olor fétido.  Si piensan que había dormitorios olvídenlo, solo había bancos de piedra.  Para las mujeres vivir en prisión implicaba humillaciones adicionales por cuestión de roles de género, ya que era un centro penitenciario mixto y los hombres tenían más privilegios que ellas. Por ejemplo, preparar la comida dependía exclusivamente de las mujeres, así que las prisioneras servían los alimentos a los hombres, quienes muchas veces ya habían cometido abuso físico, psicológico o sexual contra ellas. Todas estas condiciones estaban previstas como parte del castigo y normalizadas en el proceso penal.

A finales del capítulo XIX y en el capítulo XX conocemos otra atrocidad que enfrentaban los presos, la confesión bajo tortura.

El gran argumento de Payno es sencillo, el objeto del sistema penal no debería ser atormentar a los justiciables, peor aún, castigarlos sin pruebas de ser personas alejadas de la ley y los preceptos morales.

 

Perder la libertad, perder el honor en prisión, es más que perder la vida; por eso, si hubiera en México hombres de un espíritu filantrópico y humano, habrían promovido antes de ahora el establecimiento de casas de detención, administradas por hombres de una inflexible severidad, de una rígida moral, para que mientras la justicia averigua si en efecto hay o no crimen, se guardara con una separación debida, el respeto que se debe al infortunio, a la inocencia o a la virtud. (pág.199).

 

En el contexto actual de la reciente sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el caso Tzompaxtle Tecpile vs México, resulta relevante leer El Fistol del Diablo para comprender que el tema de la justicia y el respeto a la dignidad humana no es un tema que se reduce a los tribunales y profesionistas especializados en la materia. Manuel Payno concluyó 177 años antes, lo mismo que la Corte Interamericana hizo en el año 2022. Espero que esta lectura nos ayude a comprender que todos podemos saber qué es justo y qué es injusto sin importar si nos sabemos o no todo el compendio de legislación vigente sobre derechos humanos. En todo caso, pensar que necesitamos de tantas leyes para saber qué es la justicia es el principal obstáculo para ser justos. Manuel Payno fue una persona de carne y hueso como tú y como yo, vivió en una época con poca normatividad en derechos humanos, pero eso no le impidió usar la razón para entender qué es la justicia.


No se pierdan la oportunidad de leer El fistol del diablo para descubrir más detalles sobre La Acordada, la cárcel más temible de México.

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