Lo que el Dr. Rosalío vio oculto en el derecho
Por Manuel de J. Jiménez
El pasado primero de diciembre se llevó a
cabo en el Posgrado de la Facultad de Derecho de la UNAM un encuentro académico
para celebrar la vida del Dr. Rosalío López Durán, particularmente en torno a
una de sus ideas: “El currículum oculto en la enseñanza del derecho”.
Estoy seguro que Lo oculto en la
enseñanza del derecho de López Durán, por el tema que aborda, la
originalidad del tratamiento y la profundidad investigativa, se convertirá en
un clásico dentro de las aulas de derecho, si no es que ya lo es. La obra
procede de la tesis que presentó el autor para optar por el grado de Maestro en Derecho en
2003. Dicho trabajo académico llevaba el título de “Curriculum oculto y proceso
enseñanza-aprendizaje en la Facultad de Derecho”. La versión que publicó la
editorial Porrúa, en 2008, contiene algunas actualizaciones de aquel maestrante
que se convirtió, con el paso del tiempo, en un investigador referente en la
Facultad de Derecho de la UNAM, formando a un sinfín de generaciones en
Licenciatura y Posgrado. Yo mismo fui su alumno durante mi paso por la
maestría.
¿Por qué es importante
escribir sobre el currículum oculto al que están expuestos los estudiantes,
muchas veces sin saberlo? Sin duda, se ha escrito mucho sobre pedagogía
jurídica, pero sólo una mente aguda y observadora advirtió que los alumnos de la Facultad y, en general, de muchas otras instituciones universitarias
donde se enseña derecho en América Latina, son sometidos a un cúmulo de saberes y prácticas que
pueden o no obrar formalmente en el plan de estudios. En palabras del Dr.
Rosalío, el currículum oculto “son todas aquellas prácticas que tienen lugar
dentro de la experiencia escolar pero que no figuran explícitamente como propuesta
curricular”. Escribir sobre este tema es per
se innovador, pues aunque hay una tradición crítica
de estudios al respecto, estos no habían sido llevados debidamente al campo de
la enseñanza jurídica.
En el evento celebrado el
día del natalicio del autor, la Mtra. Guadalupe Juárez leyó un soneto que
escribí al leer el libro Lo oculto en la
enseñanza del derecho. Aquí lo trascribo:
Hay que atender y ver el plan de estudios,
pues se dará al fin una buena base.
Diseñar e impartirles cada clase:
leerán libros, capítulos, preludios.
Mas el alumno vivirá interludios
cuando por los ocho semestres pase.
Atenderá el rigor entre la frase,
la sombra, el poder y sus latifundios.
Vive así tantas lecciones el grupo:
unas se detallan, otras se ocultan.
¿Qué lección es más significativa?
Una respuesta Rosalío supo.
Está aquí, en el libro. Siempre resultan
los signos una vía educativa
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